2. Identificar y analizar los principales riesgos que enfrentan las empresas familiares, tanto internos como externos.
3. Desarrollar habilidades para evaluar y priorizar los riesgos según su probabilidad e impacto en el negocio familiar.
4. Aprender a diseñar e implementar estrategias de mitigación y adaptación para abordar los riesgos identificados.
5. Fomentar una cultura de gestión de riesgos en la empresa familiar, involucrando a todos los miembros y empleados en el proceso.
6. Monitorear y ajustar las estrategias de gestión de riesgos de manera continua para mantener la resiliencia y la competitividad del negocio familiar.